INSEGURIDAD

La seguridad es una sensación, al igual que su opuesto: la inseguridad. Es una sensación como también son dos realidades inversas, contrarias. Algo que es seguro no tendría que ser inseguro. ¿De qué nos extrañamos con la violencia en las calles en un país que hace menos de un mes vió cómo asesinaban a dos jóvenes por pedir trabajo? Un país que vió, observó, se durmió en su comodidad diaria o incomodidad (da lo mismo) y se escondió, asustado, de la violencia -sea piquetera, policial o de todos los días- y se sumergió en el olvido como tantas veces. Es por esa razón que nada debe extrañarnos, desde la toma de rehenes en vivo y en directo (¿no habrá estado todo preparado? ¿por qué ese día -vaya casualidad- Lanata no condujo su programa por América?), hasta las continuas estadísticas de robos, hurtos y violencia infantil. Si es seguro que una de las consecuencias de la pobreza sea la delincuencia de qué nos extrañamos en un país en que la mitad es pobre.

Para el que no tiene o para el que ve que otros todo lo tienen, no es un pecado robar. Para aquellos que se han cansado de ver cómo los ricos y ladrones andan sueltos por la calle o por las pantallas de televisión con total impunidad, qué deberían sentir. No es cierto que todos los pobres sean chorros como tampoco lo es que todos los ricos hicieron la plata por astutos e inteligentes. ¿Quién dijo que en la Argentina nadie hace la plata trabajando? Sí, un actual senador de nuestro honorable Congreso de la Nación. El mismo que le mandó a pegar al conductor de Televisión Registrada hace unas semanas atrás.

No se solucionan los problemas ocultándolos, no se curan las heridas poniéndoles una curita y no sanándolas. No se calma el hambre de los desesperados con migajas, limosnas y planes trabajar de $150 mensuales. No se termina la inseguridad con represión, muerte y más violencia estatal. No te dejarán de robar por tener una mejor alarma o por estar armado. A lo sumo te convertirás en un asesino. ¿Qué logró el gatillo fácil? ¿Qué hace e hizo nuestra famosa policía bonaerense? En un país en dónde se está a punto de descubrir que los asesinatos a los jóvenes piqueteros fueron premeditados y que ya estaban identificados por la policía antes de los trágicos hechos, ¿de qué nos extrañamos? Un país en el cual un mafioso compra un canal como si comprase un nuevo par de zapatos sin rendir cuentas a nadie. Una televisión que no informa sobre los piqueteros y los olvida. Ahora los que venden son los pibes chorros.

Si un chico sabe lo que hace cuando sale a robar y esa es la premisa por la cual deben ir preso y bajarse la edad de impunidad, ¿por qué no pueden votar, manejar, ser presidentes o diputados? ¿Por qué algo sí y otra cosa no? ¿Por qué? Esos pibes pueden ser los hijos de los que tanto hablan y hablan. Si la pobreza y el hambre siguen en aumento, mañana nosotros saldremos a robar y nuestros hijos a matar por $5. Así es. Aunque duela admitirlo. No se trata de edades, el tema pasa por otro lado. Como dijo, Rafael Bielsa: "en la cárcel son todos pobres";. ¿Hay algún rico preso? Claro, ninguno es chorro, si en este país la corrupción no existe. Los medios están asustados y hacen su negocio. ¿Será que sus dueños tienen miedo? ¿Será que iniciaron la fervorosa marcha para lanzar la mano dura? Patti, Rico, López Murphy, Menem, Macri, De la Sota tienen más espacio del que deberían tener. Son los candidatos del poder. Son los que sembrarán más sangre y hambre para salvar a su casta.